EL PUEBLO ARGENTINO TIENE LA RESPONSABILIDAD HISTÓRICA DE CONSOLIDAR EL GOBIERNO NACIONAL Y POPULAR
Por: Jorge Rachid
No es una nueva etapa, es la posibilidad de la consolidación histórica del peronismo como eje cultural, ideológico, político y filosófico, del conjunto de expresiones culturales de la Patria Grande Latinoamericana, que en su hora actual, está protagonizando a través de los pueblos, la búsqueda final de la consolidación identitaria, americana, mestiza, morena y profunda, que viene desde los albores de los pueblos originarios, hasta nuestros días, integrando culturas en un sincretismo de nueva identidad, aún joven pero dinámica y potente.
El gobierno nacional y popular, expresión de una unidad patriótica que entendió los planes del enemigo, de fragmentar, dividir y promover la diáspora social, emergió como la respuesta necesaria ante la brutalidad inhumana del capitalismo salvaje, financiero en lo económico, devastando derechos sociales y avasallando soberanía, sometiendo al pueblo al dolor social y al saqueo patrimonial de una Argentina, inerme ante los ataques de intereses extra nacionales, que comprometían nuestro futuro como Nación.
Por esa razón el nuevo gobierno no sólo debe gozar del apoyo del conjunto de las fuerzas nacionales y populares, más allá o más acá de verse o no reflejados cabalmente en sus circunstancias tácticas, lo cual determinará que los planteos del pensamiento crítico necesario en cada etapa de la vida política, se realicen sin alimentar los planes destituyentes de un enemigo al acecho. Quienes enfrenten públicamente al gobierno, desde posiciones supuestamente “progresistas”, estarán dando al enemigo herramientas golpistas, como lo hizo “la izquierda” boliviana, según denunció García Linera desde México..
Los planteos estratégicos, importantes en el tránsito de construcción de un nuevo modelo social y productivo solidario, en una Patria justa libre y soberana, integrada y protagonista en la Patria Grande, se deberían realizar buscando la ecuación política de tiempo y espacio, es decir la acumulación y difusión necesaria, para que cada batalla por esa construcción, que siempre hiere intereses y genera reacciones, sea vencida por el conjunto del pueblo, en conciencia de la defensa de sus derechos y como sujeto histórico, responsable de establecer los nuevos paradigmas.
Es un tiempo de lucha política, de reparación social ante la catástrofe, donde las prioridades siempre estarán dadas por las necesidades del pueblo argentino. Al mismo tiempo, es necesario reconstruir escenarios estratégicos que permitan ir transitando en lo táctico, hacia el fortalecimiento de los pilares estructurales del nuevo Modelo Social y Productivo Solidario con Justicia Social e Independencia Económica, construyendo la Soberanía Nacional necesaria para integrar la deuda histórica de recuperar el sueño de la Patria Grande de nuestros Padres Fundadores: San Martín, Artigas y Bolívar.
La batalla cultural necesaria para lograr esos objetivos, larga en el tiempo, pero imprescindible para la consolidación de la identidad nacional, federal, popular y emancipadora, será sin dudas la más importante por brindar, derrotando al mitrismo en su relato histórico, conceptualmente colonial de “civilización o barbarie”, con que inunda la educación sistemática primaria y secundaria, pasando por las formaciones profesionales que restituyan el Pensamiento Nacional como eje de construcción del pensamiento del pueblo argentino, envolviendo de patriotismo nuestras luchas por los sueños colectivos, con abnegación humildad, compromiso y entrega, al servicio del pueblo argentino y latinoamericano.
PRIMERO LA PATRIA
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